Algunos son capaces de actuar con sabiduría cuando la ocasion lo requiere.
Otros se ven obligados a permanecer despiertos largas horas, presos de angustia, antes de descubrir la solucion correcta al problema planteado. Pero aunque estas diferencias innatas sean en cierta medida inevitables, cada uno puede alcanzar dones de sabiduría insospechada adoptando "Los Cuatro Votos".
Parece que cualesquiera que sean los dones personales, cualquiera que sea la dificultad del problema, a una reflexión suficientemente larga y profunda. En tanto uno funda su razonamiento sobre el "YO", puede ser muy prudente y abstuto pero no sabio.
Los seres humanos son insensatos y le hes dificil abondonar su "YO". A pesar de todo, un individuo enfrentando una situación complicada tiene grandes posibilidades de encontrar una solución, si llega a abstraerse momentáneamente del problema, concentrándose sobre "Los Cuantro Votos" y abandonando su "YO".